Nací en Argentina, migré a cuatro países, parí en tres idiomas. Viví en inglés, rezo en hebreo, pienso en español. Amo mi lengua madre por lo que es: seductora, lujosa, rica e intelectual.Y por lo que puede ser: atorrante, mundana, chabacana, popular. Este blog nació cuando vivía en Australia mientras arrullaba a mi hijo en español y alrededor todo era inglés. Ahora vivo en México, extraño el inglés, canto en hebreo y quiero aprender chino mandarín. Sueño con vivir en New York. O en Tel Aviv.
Llega del jardín, entra, toma la leche con Chocapic. Suena el teléfono, atiende con su vocecita de cinco años:
-Hola, puedo hablar con tu mamá
-No, no está
-Ah, salió. ¿Y dónde está?
-En twitter